Por encimita


¿Quién soy?

Creo que una buena manera de iniciar este espacio es haciendo un resumen de mi hoja de vida, porque muchos de ustedes me conocen, pero otros no, así que me presento:

Soy Elba Cecilia Restrepo González, más conocida como Elbacé Restrepo. Tengo cincuenta y pico de años. Nací en Ciudad Bolívar,  Antioquia, donde viví hasta los diez años. Cuando me gradué del colegio mi proyecto de vida no contemplaba nada distinto a ser periodista y con ese fin me presenté a la Universidad de Antioquia, pero no pasé, como cosa rara.  Empecé un curso de francés y otro de teatro, como escampadero mientras pasaba esa tormenta de no saber qué hacer con mi vida a los dieciocho años. Al mismo tiempo era asistente del director de Radionovelas en Caracol, en un intento fallido de esa emisora por revivir el género dramático en radio.

Escribí una radionovela completa, llamada Amor eterno, y muchos, pero muchos libretos de radionovelas ajenas, cuando el director empinaba el codo más de la cuenta y la responsabilidad recaía sobre mis hombros. Fue la primera vez que recibí dinero, muy poco, por cierto, por cuenta de las letras, los puntos y las comas.

Luego ingresé a la Universidad, pero no a mi carrera soñada, sino a Licenciatura en Español y Literatura, con la idea de pasarme luego a Comunicación, sueño que, por muchas circunstancias, nunca pude hacer realidad. Estudié cuatro eternos semestres de Licenciatura y, cuando me di cuenta de que no iba a poder hacer el cambio de carrera, tiré la mochila y me dediqué a la vida laboral. ¡Era periodista o nada!

Después llegó el amor… me cogió un hombre y me dio tres vueltas.  Hace más de 30 años estoy felizmente casada con Giovanny Rúa Vásquez y tenemos dos hijos: Ana Sofía y Juan Pablo. Ahora estamos esperando a nuestra primera nieta, Guadalupe, Guadalupita de mi corazón, que nos llevará a un próximo aterrizaje, espero que muy feliz, en el mundo tierno y dulce del abuelazgo.

Soy ama de casa, a mucho honor y por convicción. Durante los últimos 17 años me desempeñé como columnista de opinión en el periódico El Colombiano, a donde llegué por mis propios medios. Casi mil artículos después, sentí que estaba cargando sobre mis hombros un piano que desbordaba mi capacidad, que necesitaba un respiro, parar, hacer una pausa, tomar aire y sentarme a esperar el alma. Se llama “cansancio” y me parece que es necesario reconocerlo. Renuncié hace muy poco a ese privilegio, pero no renuncié a escribir y por eso estoy aquí, contándoles un poco de mí.

También he escrito para la revista Mirador del Suroeste, y he sido columnista invitada y esporádica de algunos otros medios.

Mi primer libro, Por encimita, Recopilación de artículos, fue publicado por editorial Planeta y la Alcaldía de Medellín en 2011, en el marco de la colección Letras Vivas de Medellín. Hace aaaaños tengo en remojo un libro de tinte costumbrista en el que intento recoger la tradición oral de mis antepasados campesinos. No he podido redondearlo, pero sigo en el intento.

En unos días saldrá a la luz un segundo tomo de selección de artículos escritos entre 2012 y 2022, una mirada a la vida en diez años y ciento veinte artículos, algunos inéditos. Tendrán noticias próximamente.

Soy lectora compulsiva: leo todo lo que cae a mis manos, incluidas las cajas de los medicamentos, los empaques de los productos de aseo y las revistas viejas de las salas de espera. Y de tanto en tanto escribo columnas, cartas, cuentos, crónicas, en fin… Soy una mujer común y corriente, tratando de vivir en paz en medio de tanta confrontación y escribiendo para enviar un mensaje, ojalá positivo, a mis lectores. Me gusta pensar que, a través de mis palabras sencillas, mis mensajes directos y mi sensibilidad por el día a día, que pasa frente a nuestros ojos y a veces no lo vemos, puedo ayudar a que este mundo, al menos en una milésima parte, sea un poco mejor.

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